De pronto ya trabajaba en una oficina de un partido político, estábamos cerca de las elecciones y a pesar de que no entré con el propósito de colaborar directo con el asunto político, al final cedí porque aun no sabia lo que me esperaba.
Como es costumbre y clave importante en campaña el proselitismo fue una de las cosas que me avergonzaban ya que no estaba de acuerdo, me parecía hasta cierto punto ridículo. Conforme pasaron los días iba escuchando con más atención las propuestas de los candidatos hasta que llegó el momento en que me creí todo lo que decían, dejé de ser escéptica y los apoye de lleno; me hacían escribir datos de las personas que necesitaban apoyo, con gusto lo hacia pues me motivaba aun mas con el pensamiento ingenuo de: "Esto es el inicio de algo grande, al fin estoy haciendo algo para ayudar a tanta gente que lo necesita". Al principio pasaba la lista al jefe de campaña para comenzar una base de datos e ir eliminando a las personas que recibirían ayuda, pero solo decía "Aun no llegan los fondos de campaña" y cada mañana cuando una persona iba a pedir lo que le prometieron buscaba la forma de decirles que no hay modo aun de apoyarlos pero que regresen unas semanas después que para eso es seguro que lo tengan, ya que es lo que me hicieron creer.
Pasó un mes y había mas gente en las caminatas a los que se les llaman brigadistas, para esos días caminábamos dos veces por día y nos pagaban por semana, pero llego el momento en que seguían aceptando brigadistas, personas que realmente necesitaban el dinero porque estaban en una situación verdaderamente extrema de necesidad, sin embargo al momento de pagar comenzaba la traición, no les pagaban lo correspondiente o simplemente los ignoraban. Cuando comenzó todo esto se me rompió el corazón porque veía a esas personas realmente esforzándose, porque sabia que tanto el candidato como el jefe del partido y campaña (parecía negocio familiar) están llenos de dinero y no tenían el suficiente corazón para apoyarles como cuando dieron su palabra.
Varios sucesos que fueron decepcionándome cada día hicieron que pierda el interés por el candidato a presidencia y el jefe del partido (su hermano), aun así todo empeoro; llegaron 100 despensas (no recuerdo bien si es la cantidad correcta) y enseguida pensé: "Al fin podre borrar tantos nombres de mi base de datos, al fin ayudare a alguien" cuando me dijeron que eso seria para las famosas liderezas porque aun que ellas no lo necesiten, ellas nos consiguen votos; de nuevo mi enojo y frustración subieron al máximo. Llegaba a casa estresada, enojada y triste, algunos días visitábamos lugares que no sabia ni siquiera que existían en mi ciudad, en estados que sabes que existen pero nunca habías tenido tan cerca de ti y eso es totalmente diferente al simple hecho de saberlo...
Al final de campaña mucha gente fue traicionada incluso los del mismo equipo, los fondos del partido "nunca llegaron" pero el jefe tenia coche nuevo, casualmente construían en una de sus tantas propiedades y mi base de datos logro cerrar muy pocos casos porque me las ingenie sin permiso del jefe.
Ahora viene la parte que me hizo ser una buena mexicana porque ahora se, y ahora conozco muy bien como son todos los que se llaman políticos y el inicio de todo esto que me anime a compartir con ustedes:
6 meses después de que me gradué de la preparatoria recibí una llamada de "Francisco Reyes" director del PVEM de Cozumel, preguntándome si me gustaría ser parte de un grupo de chavos que harían actividades ecológicas y yo lideraría tal grupo, me pregunto si trabajaba y/o estudiaba a lo que respondí que no y fue cuando me ofreció el trabajar en las oficinas del mismo partido a lo que dije que si, ya que lo había conocido dos años atrás presentados por una compañera de un famoso proyecto "Ecobach" de mi preparatoria por la cual recibía esta llamada. Llego el día de reunirnos en las oficinas para discutir como se manejaría ese grupo de chavos llamados "Jóvenes verdes" y mi función en la oficina, así lo hice y trabaje hasta que llego campaña (historia que ya les conté), desde el principio cuando comencé a trabajar ahí, mi jefe Francisco siempre "olvidaba pagarme", al principio me daba pena pedirle mi sueldo y como no lo veía mucho lo excusaba con que estaba ocupado. Francisco siempre logro el modo de hacerme sentir parte del comité, me invitaba a las reuniones, me hacia sentir parte de ellos, importante.. Pero cada quincena se le olvidaba que existía, dejé pasarlo aun en campaña porque no me urgía el dinero (un mal pensamiento que me llevaría a una de las cosas que no sabría como enfrentar), trabajaba lo doble que todos ya que tenia mas funciones y en los dos meses y medio de campaña nunca me pagó, se lo pedía y me daba menos de la mitad de todo lo que me debía; al final de campaña decidí renunciar a la oficina pero seguir con jóvenes verdes, fue cuando decidí pedirle que me pagara todo lo que me debía (Cerca de 6 mil pesos), ya que no iba a la oficina le llamaba por teléfono, no me contestaba o usaba los viejos trucos de que su celular estaba fallando, no contestaba los Whastapps. En ese momento senti que me dio una fuerte y profunda puñalada por la espalda, no podía creer que me hacia eso porque fui de los que lo apoyo mas, trabaje mas duro. Semanas después me entere que se fue a las Vegas, no es porque no tenia dinero el porque no me había pagado y eso lo sabia, ganaba cerca o un poco mas de 100 mil pesos quincenales...
Aun no se que pasara con mi dinero, pero creo que es algo ya perdido, no es como si fuera un jefe de cualquier empresa, es político, no le tengo miedo pero no se donde encontrarlo o como hacer para que me tome en serio ya que solo tengo 19 años y no tengo modo de presionarlo.
Aquí les dejo la foto de bienvenida a lo que seria una experiencia inusual.
Y aquí la bienvenida escrita: http://pvemcozumel.blogspot.mx/2013/02/frn-pesenta-la-nueva-dirigente-de.html
