Es que quizás nunca he sentido tal necesidad de tener todos mis sentidos atentos para percibir cada imagen, cada sonido y cada uno de tus gestos
Esa sensación de ser todo lo que alguna vez soñé y sigo soñando en tu ausencia.
El ayer despertar, esa sensación tan pura inocente que solo sentimos cuando fuimos niños, soñar y disfrutar como ellos, sin preocupaciones más que sentirse estático en ese momento infinito que recordaremos por el resto de nuestras vidas.
De pronto hoy al presente invade nuestra memoria recordar con una última lagrima y sonrisa involuntaria que aparecerá centellante cada vez que encendamos ese hermoso recuerdo. Y a lo largo del tiempo he descubierto que solo existe ese gozo infinito cuando estoy junto a ti, cuando la comprensión, cuando la amistad y cuando el amor pronto...
Hoy al cerrar los ojos y tratar de reconstruir esa última bajada de mi memoria me ha pesado en silencio este sentimiento y a pesar de que la vida quiso caminos distintos para ambos... TE LO DIRÉ
